Veganos y vegetarianos
Por decisión personal, creencia, adaptación, hartazgo o simple tendencia los diferentes regímenes alimenticios o formas sobre el consumir tal o cual producto se han multiplicado en los últimos años. Aunque siempre con la duda de ¿si realmente como lo qué mi cuerpo requiere?
Que si se es vegano, vegetariano, ovovegetariano, lactovegetariano, etcétera, lo cierto es que hay una ausencia de proteína animal en estas dietas y estilos para comer. En estricto sentido, el vegano lleva a un siguiente paso su estilo de vida al no consumir, comprar o utilizar ningún producto o derivado (ropa, accesorio, calzado y demás) de origen animal; mientras, el vegetariano sólo cuida su régimen alimenticio.
Dentro de éste último existen diversas tendencias sobre si se permiten consumir lácteos, huevo, o llegan a consumir algo de carne, considerándose flexi-vegetarianos (flexitarians) con la idea de darle al cuerpo una dieta completamente balanceada sin caer en abusos. Lo cual nos permite entender de manera global que el cuerpo es una máquina y que funciona gracias a la gasolina que le suministramos, sin necesidad de tener un origen único, pero si con componentes bien establecidos.
El hombre se ha definido como un ser omnívoro capaz de alimentarse de plantas y carne, cuando lo que a lo largo del tiempo lo que ha determinado sus conductas alimenticias ha sido la adaptación. Y bajo este principio respondemos la duda del inicio: No, no es necesaria la proteína animal para el ser humano.
Diversos son los discursos sobre si se debe o no comer carne, que si desde los noventa se descubrió que los dientes no son para triturar carne, sino para defenderse de peligros.
Que si una vaca con 4 estómagos no está diseñada para digerir carne, menos nosotros con sólo uno. Discutidas o no, la verdad es que el humano es capaz de adaptarse y para ello hay que balancearse.
¿Qué aporta la carne y de dónde lo podemos obtener?
La carne aporta tres aminoácidos esenciales, mismos que pueden conseguirse principalmente de leguminosas (frijol, lentejas) y cereales (maíz, trigo), pero no en la misma cantidad.
Es decir, si como 100 gramos de carne; 100 gramos de leguminosas y cereal no me dan la misma cantidad de dichos componentes.
He ahí la importancia de consultar a un especialista, sin importar el régimen con el cual te alimentes, ello hasta conocer las porciones necesarias (y que puedo comer sin presentar alergias) para que tu cuerpo se mantenga sano y con un gran funcionamiento.
De la misma manera hay que entender al cuerpo y ayudarle a recibir los nutrientes requeridos y para ello la biodisponibilidad es una gran herramienta. Conocer de qué forma se da una mejor asimilación incluso de minerales como el hierro y el calcio. Un ejemplo, si consumo espinaca es más sencillo que absorba el hierro si le agrego un poco de limón (debido a su PH), que si la como completamente sola.
Por su parte es importante remarcar que dependiendo de tu estilo de vida necesitas la ingesta, es decir si haces actividad física de manera esporádica, si entrenas o eres un atleta de alto rendimiento.
Carl Lewis (múltiple campeón olímpico), Martina Navratilova (la mejor tenista de la historia), Bill Pearl (4 veces Mister Universo) y Dave Scott (seis veces campeón mundial de pruebas Ironman), son ejemplo de que sin importar tus métodos de alimentación lo realmente importante es mantener a tu cuerpo en armonía y con la cantidad de gasolina que requiere, ya que él se encarga de filtrarla y hacerla llegar a donde se necesita para que tu máquina no se oxide. Así que cierto es ese dicho de que dice que a todo se acostumbra el hombre… menos a no comer.
Diego Almeida
Entrenador Personal
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